En Paracas, donde el mar parece sostener el silencio y el viento se convierte en guía, Curva Studio celebró su primer aniversario con una propuesta que trascendió el ejercicio físico. Su primer Wellness Retreat, en alianza con Hotel Paracas, a Luxury Collection Resort, transformó la costa peruana en un escenario de conexión y equilibrio. Allí, entre amaneceres dorados y tardes de brisa salada, el Pilates Reformer se integró con el paisaje, revelando una nueva dimensión del bienestar contemporáneo.

Veinte creadoras de contenido del universo wellness, fitness y lifestyle —entre ellas Mafer Neyra, Belén de Osma, Gia Meier y Ale Bobadilla— fueron parte de esta experiencia curada al detalle. Clases frente al mar, sesiones de Pilates Mat, rituales de sound healing y paseos en yate se combinaron con momentos de quietud, donde el cuerpo aprendía a escuchar al entorno. “Buscamos transformar la forma en que las personas se relacionan con el movimiento”, afirmaron sus fundadoras, consolidando así el espíritu que ha llevado a Curva de Miraflores al epicentro del wellness de lujo en Perú.



El lujo del bienestar consciente
El retiro, respaldado por Ford, L’Occitane, Inside Activewear y el propio Hotel Paracas, no solo celebró un aniversario: representó un manifiesto. En un contexto donde el wellness se redefine como una experiencia integral, Curva Studio plantea una nueva lectura del lujo: aquel que se mide en presencia, en respiración y en autenticidad. La marca reafirma su identidad no como un espacio de entrenamiento, sino como una comunidad que se expande con propósito y coherencia estética.
El entorno natural de Paracas se convirtió en el aliado perfecto para esta narrativa. Las olas, el sol y el sonido de los remos marcaron el ritmo de un fin de semana donde la energía colectiva fue tan importante como la disciplina. Cada movimiento, cada pausa, fue diseñado para recordar que el bienestar no es una meta, sino una práctica de belleza interior.



El futuro del wellness tiene forma de curva
El éxito del retiro abre una nueva etapa para la marca. Curva Studio prepara la apertura de su tercer espacio y el lanzamiento de experiencias en destinos de lujo dentro y fuera del país. Su propuesta, que equilibra innovación, comunidad y diseño, reafirma que el bienestar del futuro será experiencial, sensorial y profundamente humano.
En su primer año, Curva no solo ha cambiado la forma de hacer Pilates en Perú: ha redefinido el movimiento como lenguaje, y el cuerpo como el lugar donde habita la belleza del presente.
Escribe: Nataly Vásquez