En un mundo donde hablar de dinero sigue siendo un tabú en muchos hogares, Ara Layseca se ha convertido en una de las principales referentes en educación financiera en el Perú. Su historia, marcada por desafíos personales y una misión clara, la ha llevado a impactar a miles de personas a través de su contenido, libros y proyectos educativos.
Un año sin compras: el reto que cambió su vida
El viaje de Ara hacia la educación financiera comenzó con un desafío personal: un año sin compras. En el 2017, decidió embarcarse en esta prueba con el objetivo de ahorrar dinero para estudiar moda en Londres. Tres años después, repitió el reto con una nueva meta: pagar su auto en tiempo récord y evitar pagar intereses excesivos. “Terminé pagando $80 de intereses por lo rápido que pagué mi crédito vehicular”, recuerda.
Más allá del impacto económico, enfrentar este reto no fue fácil. Resistir la presión social y el constante bombardeo de publicidad fueron algunos de los desafíos más grandes. «Definitivamente lo más duro de estos retos, fue hacer algo que nadie más hace y exponerme al ‘qué dirán'», confiesa. Sin embargo, el apoyo de su entorno resultó ser clave: «Mis amigas y compañeras de trabajo sabían del compromiso que tenía con el reto, y fueron un constante recordatorio».

Edufinal LATAM: cambiando la forma en que los niños aprenden sobre dinero
Desde su experiencia personal, Layseca encontró un propósito mayor: la educación financiera infantil. Así nació EDUFINA LATAM, un proyecto que busca transformar la manera en que niños y jóvenes entienden el dinero. «Nuestro objetivo es que las nuevas generaciones crezcan con una noción más avanzada en relación al dinero. Que poner este tema sobre la mesa deje de ser raro, o incómodo», explica.
Para ella, el dinero es mucho más que un recurso económico; es una herramienta de empoderamiento. «Cultivando generaciones empoderadas a través de sus recursos, estamos cultivando personas que son capaces de generar sus propias oportunidades en la adolescencia y adultez», afirma. Su inspiración proviene de su entorno: «Siempre he tenido una linda conexión con los niños… Siempre sentí una responsabilidad de cuidarlos, amarlos incondicionalmente y darles un buen ejemplo».

De emprendedora a autora: la educación financiera llega a los libros
Uno de los hitos más importantes en la carrera de Ara Layseca fue el lanzamiento de su primer libro: «Giver y sus amigos», en 2021. Este texto, dirigido a niños, busca explicar sobre finanzas de manera sencilla y accesible. «Sentí una conexión plena con cada personaje y me fluyó mucho expresar lo que quería», confiesa.
Sin embargo, incursionar en el mundo editorial en el Perú no ha sido un camino sencillo. «Es una alegría profunda pero también un entorno bastante complejo. Yo decidí autopublicar mis libros. He invertido mucho en mis libros y mi negocio», comenta. A pesar de las dificultades, su compromiso con la difusión sobre el manejo del dinero sigue intacto.

La libertad económica y el desafío de cambiar creencias
Uno de los pilares de su mensaje es la libertad financiera, pero alcanzar este ideal no solo implica aprender sobre finanzas, sino también romper con creencias arraigadas. «Uf, esto lo sigo trabajando», admite. «Al inicio era solo moldear hábitos: exigirme gastar menos de lo que gano, cultivar el hábito del ahorro… Pero detrás de todo ese mundo teórico, te encuentras con un mundo más profundo: tus creencias y heridas de la infancia que también empiezan a tocar el mundo del dinero».
Su proceso de aprendizaje la ha llevado a reflexionar sobre las decisiones monetarias impulsadas por emociones y a fusionar su conocimiento teórico con un enfoque más introspectivo. «Mientras más aprendo de mi propia historia, soy mejor herramienta para las personas a las que quiero ayudar», concluye.
Con su enfoque fresco y cercano, Ara Layseca está logrando lo que pocos han conseguido en el Perú: hacer que la educación financiera sea accesible, comprensible y, sobre todo, relevante para niños y jóvenes. Su historia es un testimonio de cómo la perseverancia, el propósito y la educación pueden cambiar vidas y romper ciclos de escasez.
Redacción: Alexandra Jave Calderón