En un rincón de Lima, donde los días parecen precipitarse entre ritmos frenéticos, dos voces encontraron en el movimiento un lenguaje para resistir y transformar. Claudia Pacheco Torres y Andrés Pérez Zanuzzi comenzaron hace una década con apenas dos camas Reformer en un apartamento; hoy, después de atravesar pérdidas y desafíos durante la pandemia, han tejido una comunidad que respira cercanía, ciencia y cuidado. Lo que alguna vez fue un experimento íntimo es ahora FIT STUDIO PERU, un universo donde el cuerpo no solo se fortalece: se escucha, se educa, se vuelve territorio de resiliencia.

Una metodología que se adapta al cuerpo, y no al revés
El método que impulsan rompe con la rigidez del Pilates tradicional. El Pilates Reformer Integral de FIT STUDIO PERU es una práctica expandida que combina fuerza, flexibilidad y estabilidad en cada sesión. No se trata de imponer un molde, sino de adaptar el movimiento a la persona, con evaluaciones precisas y ajustes en tiempo real.
La cama Reformer patentada por los fundadores no es un detalle técnico, sino la pieza que abre nuevas posibilidades: más segura, más versátil, más cercana a la realidad de cada alumno. Aquí, el progreso no depende de cuánto se resiste, sino de cómo se acompaña.

El valor de un guía que observa en silencio
En este espacio, los instructores no son simples directores de clase, sino facilitadores del progreso individual. Cada uno ha sido formado directamente por Claudia y Andrés, bajo un sistema que privilegia la observación, la escucha y el acompañamiento cercano.
Cada alumno ingresa a través de una evaluación inicial, donde se identifican limitaciones, dolencias y objetivos. A partir de allí, la experiencia se construye como un mapa personal: ajustes de intensidad, respiración guiada, alineación biomecánica y retroalimentación constante. El resultado es un entorno donde la técnica clínica convive con la empatía de un guía que sabe cuándo hablar y cuándo guardar silencio.


Crecer sin perder la esencia
FIT STUDIO PERU no se expande a toda prisa. Su crecimiento es deliberado, casi artesanal. Abrir una nueva sede no es solo abrir un espacio físico, es garantizar que la cultura de aprendizaje y cuidado se conserve intacta.
Los fundadores supervisan cada detalle, desde la formación continua de los profesores hasta la implementación de nuevas rutinas y programas de rehabilitación. La innovación técnica —incluida la evolución constante de la cama Reformer— convive con la fidelidad a sus orígenes: un compromiso con la seguridad, la personalización y el bienestar real, sin concesiones a la masificación.


Respirar, habitar, transformar
Más allá de músculos fuertes o articulaciones flexibles, en FIT STUDIO PERU el movimiento es también conciencia y respiración. Cada inhalación organiza la fuerza, cada exhalación libera la tensión, cada repetición se convierte en un acto de presencia.
La práctica se traduce en historias que trascienden el studio: una bailarina que recupera la fluidez, un adulto mayor que redescubre la libertad de caminar, una madre que logra cargar a su hijo sin dolor. Incluso quienes atravesaron enfermedades encuentran aquí un lugar para reconstruir no solo el cuerpo, sino también el ánimo.
En tiempos donde el bienestar suele confundirse con tendencia, FIT STUDIO PERU insiste en la raíz: un espacio humano, preciso y resiliente, donde cada cuerpo encuentra su propio ritmo. En ese cruce entre ciencia y sensibilidad, Claudia y Andrés no solo han creado un método; han construido una forma de habitar la vida desde el movimiento.
Escribe: Nataly Vásquez